Hace años, contratamos un representante de ventas en el oeste que había pasado décadas vendiendo los productos de un competidor. Después de una capacitación inicial, regresó a su territorio y les enviamos una serie de cables, cortadores y máquinas para que empezara. La primera vez que demostró el uso de nuestro cable Flexicore, me llamó para quejarse de que, “¡simplemente no parecía adecuado!” No sentí que fuera “elástico”.
Hay una diferencia en el diseño que hace que nuestros cables Flexicore se sientan diferentes.
Prácticamente todas las marcas de cables en la industria de limpieza de drenajes son simplemente un resorte largo, delgado y hueco. A veces, para que se asemejen a la construcción de los cables Flexicore de General, insertan un cable metálico o pedazo de plástico por el medio del resorte para darle el aspecto de una resistencia adicional.
El cable Flexicore de General es consecuencia de un proceso radicalmente diferente. En vez de enrollar un cable hueco, enrollamos apretadamente un resorte de acero alrededor de un cable metálico de calidad de aviación de 49 torones usando un proceso patentado. Hacemos estos para dar al cable la resistencia adicional cuando está sometido a un par.
Cuando una máquina de General hace girar una cinta hacia abajo de un drenaje y llega a una obstrucción o un taponamiento, aumenta la tensión o el par en el cable. Debido al sentido de giro del tambor, la reacción de la bobina exterior del resorte de acero es que tiende a contraerse debido a la tensión. No obstante, como el cable metálico está por medio, lo único que puede hacer es apretar, lo que hace que sea más rígido y más fuerte. Básicamente debido a la forma en que diseñamos el cable, se fortalece y se hace más rígido justo cuando el operador lo necesita más. Esto hace que sea menos probable que el cable se tuerza o rompa cuando se usa, y permite que el operador atraviese obstrucciones más fuertes.
Todo esto es bueno, pero tiene el efecto de hacer que el cable se sienta menos elástico que los cables huecos. Esta flacidez percibida era la diferencia que tenía confundido a mi representante. Me puse de nuevo al teléfono y le expliqué el diseño de ingeniería tras su experiencia. ¡En un plazo de unas semanas, estaba en carretera convirtiendo a sus viejos clientes a máquinas y cables estilo General!
Aproximadamente un año después, recibí otra llamada de él, ¡esta vez alabando nuestro cable! Según él, estaba vendiendo menos de un décimo de los cables de repuesto que acostumbraba a vender a estos mismos clientes cuando usaban equipos de la competencia. Aunque le costaba creérselo, siguió insistiendo que era cierto hasta el día en que se jubiló.
Desde entonces, he oído la misma historia de muchos clientes de muchas otras formas. Una vez que se convierte a General y se acostumbra al tacto del cable, la ventaja de Flexicore se amortiza muchas veces. ¡Compruébelo!
Para obtener información adicional, llame a los Drain Brains® de General, al 800-245-6200, o envíe un correo electrónico a [email protected].